Una de las claves principales de su pedagogía con los niños y los jóvenes era considerar la vida entendida como fiesta y la fe como felicidad. Por una parte, la música, el teatro, las excursiones, el deporte. Por otra, la alegría sobrenatural de la fe. En todo momento la alegría del existir, del poder trabajar, de la entrega a los demás, la alegría de la vida de cada día. El optimismo, la confianza en Dios y en las personas, saber ver y gozarse de los valores que hay en este mundo, sin lamentarse continuamente, son los secretos de su pedagogía humana y religiosa. La alegría envuelve la vida de piedad y el estudio, abre a la esperanza y suscita energías para hacer el bien. Mediante esta filosofía la Unidad Educativa María Auxiliadora hizo un espacio en sus labores educativas y participamos de un recreo animado...donde la expresión juvenil del baile nos dio momentos de esparcimiento y alegría.
"LA EDUCACIÓN ES CUESTIÓN DEL CORAZÓN"